Viviana Rodríguez, mamá de Mía, niña de 10 años que padece “discapacidad por parálisis cerebral con retraso mental severo” reclama "que la obra social nos de lo que corresponda, que cumplan con la ley".
La obra social de UTA (Unión Transporte Automotor) lleva tres años negándole tratamiento a Mía, cuando una resolución judicial ordena la cobertura al 100% de su tratamiento. El el sindicato no acata el fallo.
Viviana sostiene que la "obra social UTA no cumple con la rehabilitación y Mía empeora día a día", afirmó en diálogo con la 97.
Al tiempo que denunció : "Mi hija no tiene cama ni cuello ortopédico, no tiene las terapias que corresponden, es abandono total de la obra social y de la Defensoría que no se acerca a ver que es lo que pasa".
"La medicación tiene que llegar los primeros días del mes y llega después del 15 en general", agregó.
Mía es atendida actualmente por los profesionales del Hospital El Cruce de Florencio Varela.