Los profesionales que realizan residencias dependientes de la Secretaría de Salud de la Nación (ex Ministerio) alzaron su voz ante el arrasamiento de sus derechos como trabajadores de la salud. Residentes ralizaron un paro y movilización este miércoles desde el Hospital Garrahan hasta la Secretaría de Salud.
Los trabajadores fueron recibidos por el Dr. Javier O’Donnell que encabeza la Subsecretaría de Calidad, Regulación y fiscalización dependiente de Salud en Nación.
Como resultado del encuentro, tuvieron una respuesta que giró en torno a los siguientes ejes:
- Compromiso para garantizar ART para todos los residentes.
- Compromiso a regularizar la Obra Social de los residentes de primer año.
- Pago adeudado.
Además, este lunes se cobraría el sueldo adeudado correspondiente al mes de septiembre, del 50% de los residentes de Nación. En 10 días se resolvería el total de los residentes. El sueldo retroactivo de los meses adeudados se cobrará en el mes de noviembre.
Además, se propuso una mesa de trabajo. La primera es la semana que viene para resolver la recategorización salarial de los residentes y discusión de reglamento de residentes (guardia, almuerzo, etc.)
“La respuesta fue parcial de la que queríamos. No nos dieron lo que necesitábamos. Dijeron que el sueldo ellos lo lamentan pero que eso está arreglado en paritarias, no saben cómo van a hacer para aumentarnos el sueldo”, expresó en diálogo con Agenhoy, Andrés Cugat, médico residente de cardiología en el Hospital de alta complejidad El Cruce.
Si no hay respuesta concreta de “lo prometido por el gobierno nacional”, los trabajadores realizarán una nueva asamblea el próximo jueves a las 17.00 en el Hospital Garrahan.
Agresiones policiales
En la movilización que realizaron los profesionales de la salud, Andrés Cugat sufrió un sorpresivo ataque por parte de un efectivo policial.
“Yo estaba sobre el último cordón de 9 de Julio y Moreno. Ahí estaban mis compañeros con unas banderas cantando y lo que les pedí fue movernos más para Moreno para no molestar en tránsito. Había una fila de policías atrás que marcaban el límite de dónde podíamos estar. En ese límite aparecen 5 policías que antes no estaban y uno me pega un “escudazo” por atrás. Yo solamente estaba de espalda, encaminando a mis compañeros hacia Moreno. Me pegaron un golpe muy fuerte en la espalda”, relató Cugat.
Foto: Télam