Más de la mitad de los países del mundo que cerraron sus escuelas debido a la pandemia de coronavirus pusieron en marcha procesos de enseñanza y aprendizaje a distancia.
En América Latina son quince, entre los que se encuentra la Argentina.Así lo informó la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), que monitorea diariamente las soluciones en línea como portales y plataformas que los países ponen a disposición para sus alumnos.
Los gobiernos han respondido de diferentes maneras a esta pandemia: en algunos países no se han tomado medidas que modifiquen el normal desarrollo de la vida mientras que otros han impuesto medidas restrictivas como el distanciamiento social, prohibición de circulación y el cierre de fronteras.
En este contexto, varias naciones tomaron la decisión de interrumpir las clases presenciales en los diferentes niveles educativos.
De acuerdo con la Unesco, más de la mitad de los casi 1.600 millones de alumnos privados de clase a causa de la pandemia de COVID-19 no tienen una computadora para poder seguir las clases a distancia y el 43% carecen de acceso a Internet, una situación que amenaza con incrementar la brecha digital, por lo que pidió el uso de otras herramientas, como las clases televisadas o por radio.
Según los estudios del organismo en colaboración con la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT), 826 millones de estudiantes no tienen ordenador y 706 millones tampoco tienen acceso a Internet en sus casas.
De acuerdo a la Unesco, mientras que a mediados de febrero de este año ningún estudiante había sido afectado por medidas de cierre de escuelas, para el 10 de abril de 2020 (momento en el que se escribió el informe) ya había unos 1.600 millones de alumnos afectados por estas medidas, en 188 países que decidieron cerrar las escuelas a nivel nacional. Se trata nada menos que del 91,3% del total de estudiantes que hay en todo el mundo.
Del total de países, 96 pusieron a disposición soluciones educativas a distancia (vía internet y medios de comunicación tradicionales como la radio y la televisión); la mayor parte son de Europa del Este y Asia Central (20).
A este conjunto de países, le siguen los de Asia y el Pacífico (18) y los de Europa Occidental y Norteamérica (17).
En Argentina el 15 de marzo se dispuso, entre otras decisiones, el cierre de escuelas, lo que implicó que desde ese día 14,2 millones de estudiantes no tengan clases presenciales.
En América Latina y el Caribe, son solo 2 sistemas educativos los que no tienen cierre nacional de escuelas: Guyana Francesa y Nicaragua, según la Unesco.
La nueva situación generó desafíos: transitar la pandemia manteniendo clases sin sobrecargar a los diferentes actores; tratar de establecer un vínculo pedagógico de manera remota y estar atentos a lo que sucede alrededor en este contexto.
De todos los países que monitorea la Unesco y tienen en marcha sistema de enseñanza y aprendizaje a distancia quince son de América Latina.
Argentina puso en práctica dos soluciones: Seguimos Educando, que consiste en lecciones en TV y video por área de conocimiento para nivel primario y secundario y materiales para docentes para preparar clases en línea; y Biblioteca Digital, que permite el acceso a más de cien libros y novelas clásicas.