En abril, producto  del inicio de la cuarentena, las compras de los electrodomésticos se derrumbaron un 45% interanual y un 26% en comparación con marzo. Así lo detalló la consultora GFK Argentina, dando cuenta de que las operaciones también cayeron un 21% en el primer cuatrimestre, contra los primeros cuatro meses del 2019.

Entre los rubros analizados, por ejemplo, la comercialización de televisores se precipitó 20% interanual en abril; y los telefónos móviles, una caída de 36% interanual y 19% respecto de marzo.

La industria electrónica vivió hasta mayo de 2018 una tendencia general de recuperación. Además, 2018 fue un año donde se desarrolló el Mundial de Fútbol, con lo que ello implica para la venta de televisores y su influencia en el mercado total.

La actividad, tanto del continente como de Tierra del Fuego, proyectaba una recuperación de la crisis de 2019 pero la pandemia y el parate industrial golpea nuevamente al consumo por efecto del menor poder adquisitivo.

Antes de la cuarentena obligatoria, la ministra de Producción y Ambiente de Tierra del Fuego, Sonia Castiglione, señaló que ya iniciaron el análisis para la redacción de un proyecto que extienda el régimen de promoción industrial y que cuenta con el respaldo político de la Nación.

La industria electrónica de Tierra del Fuego se reactivó el mes pasado, como parte de la flexibilización de la cuarentena por el coronavirus.
Las fábricas ya habían retomado la producción de manera acotada, y con rigurosos protocolos sanitarios, en la ciudad de Río Grande, con la reapertura de una veintena de plantas y un movimiento de 2 mil trabajadores. Y una semana después, lo hicieron en Ushuaia.

"Se reactivó luego de 50 días de estar paradas las plantas, y antes el canal estaba vendiendo por internet, aunque había muy poco stock", señalaron fuentes de la cámara industrial Afarte a este medio. "Estamos operando muy limitados, con mucha menos capacidad productiva, cumpliendo los protocolos, con menor superficie y menor cantidad de operarios posibles, más una jornada de 6 horas", dijeron desde la entidad.

"La situación no se normalizó porque las cadenas de comercialización volvieron en algunos casos a cerrar y en la Ciudad de Buenos Aires, las grandes arterias no tienen movimiento. También vemos que el consumo no se va a recuperar enseguida", ampliaron.