«¿Cuando uno está en la presidencia de un país ¿cómo se pasa del mundo de las ideas y cómo esto se pasa a políticas reales? ¿Qué consejo le daría usted a López Obrador de México para aterrizar en la realidad de ideas y convertirlo en política? Fueron algunas de las preguntas en torno al político mexicano y la situación de ese país. La respuesta del referente uruguayo dejó sorprendidos a muchos.
«Yo no quiero hablar de López Obrador porque no me conviene hablar porque tengo que respetar la casa en la que estoy. Porque tengo que desearle suerte y comprensión al pueblo mexicano que tiene muchos problemas para que yo venga a tirarle más problemas sin ayudarle a solucionar. Yo se de todo, de las deudas sociales, el desamparo en el que han vivido durante mucho tiempo, de los sueños frustrados. Luchen muchachos, se puede vivir porque se nació igual que un escarabajo o una hormiga, pero la naturaleza nos hizo animales conscientes. A nuestra vida le podemos dar un rumbo, si ustedes no se lo dan, no se preocupen el mercado se los va a dar y se van a pasar toda la vida pagando cuotas a fin de mes y soñando que podrían estar comprando nuevas cosas», relató Mujica.
Y continuó: «La otra alternativa es que parte de su vida la gasten al servicio de un poco de utopía si quieren intentar construir un país mejor y una sociedad mejor para los que van a venir después de ustedes. Pero eso es una decisión consciente que en alguna etapa de la vida hay que tomar. Sino la realidad te va a arrastrar y vas a creer que progresar significa cambiar la moto por el auto y después cambiar el auto por un Audi y así sucesivamente. Hay que elegir. Cuando seas viejo o viaje, y los dolores de los huesos te paralicen una tarde te mires al espejo y te hagas la pregunta ‘habré traicionado al niño que llevaba adentro’ pero ya será tarde».
