El FMI consideró que el gasto público de los países deberá mantenerse elevado, hasta tanto "se haya asegurado una salida duradera de la crisis" provocada por la pandemia.
"Es necesario que el gasto público siga estando de apoyo y que sea flexible hasta que se haya asegurado una salida duradera de la crisis", señalaron este viernes Gita Gopinath, economista jefe del Fondo y Vitor Gaspar, director del Departamento de Finanzas Públicas.
Ambos directivos indicaron a la prensa, en Washington, que las políticas de respuesta a la emergencia sanitaria "también contribuyeron a que la deuda pública global llegue a su máximo nivel en la historia y se ubique por encima del 100% del PBI global".
"Todavía no estamos fuera de peligro", advirtieron y, a la vez, señalaron que "si bien la trayectoria de la deuda podría seguir aumentando, una reducción de la presencia fiscal más temprana de lo justificado representa un riesgo aún más grande para la recuperación, con mayores costos fiscales a futuro".
Los economistas consideraron que ahora "está clara la necesidad de un apoyo fiscal continuo" para enfrentar las consecuencias de la pandemia en las economías de todo el planeta.
Pero estimaron que los países tendrán que encontrar cómo financiar las políticas de expansión del gasto, para que las deudas soberanas no se conviertan en insostenibles.