El Ministerio de Salud modificó la Ley que regula la venta de medicamentos para que los fármacos lleguen a kioscos y supermercados.

A través del Decreto 1024/2024, el Gobierno Nacional modificó la legislación que regula la comercialización de medicamentos en todo el país. Ahora, los fármacos de venta libre podrán comprarse en lugares que no sean farmacias, como kioskos o supermercados. Los detalles de la ¿peligrosa? iniciativa.

Concretamente, la modificación permite que los medicamentos de venta libre puedan ser exhibidos y comprados directamente desde las góndolas de las farmacias. Hasta ahora, era obligatorio solicitarlos en el mostrador y solo productos de perfumería y cosmética podían presentarse en exhibidores.

Desde el Ministerio de Salud de la Nación explicaron que esto apunta a "cortar la asimetría de la información en materia de precios de los medicamentos y favorecer la libre elección de los ciudadanos". Sin embargo, hay otra razón para avanzar con esta desregulación: la entrada en el negocio de supermercados, kioscos y almacenes.

Así lo indicó Federico Sturzenegger, ministro de Desregulación y Transformación del Estado. Según él, este Decreto "elimina todas las restricciones existentes a cualquier negocio para la venta de analgésicos y antiácidos de venta libre". De esta manera, los comercios ya mencionados podrán adaptar sus instalaciones para vender medicamentos. La única restricción que persiste es que el comprador debe exhibir su documento de identidad para acreditar la mayoría de edad.

La desregulación (de los medicamentos) avanza

Esta modificación no es la primera que se hace durante la gestión libertaria vinculada a la comercialización de fármacos. De hecho, el mega DNU 70/23 ya autorizaba el expendio de medicamentos de venta libre fuera de farmacias y sin profesionales matriculados. Esto puso en pie de guerra al sector que acudió a la Justicia en busca de un recurso de amparo.

En este escenario, el Colegio de Farmacéuticos de la provincia de Buenos Aires (COLFARMA) lanzó una campaña explicando los riesgos de estas iniciativas. "Ningún medicamento es inofensivo. Incluso los mal llamados de 'venta libre', adquiridos sin supervisión y fuera de farmacias habilitadas o farmacias hospitalarias pueden causar problemas graves en la salud de los pacientes".

Otra iniciativa, que también generó dudas en los especialistas, fue la apertura para que las provincias puedan importar fármacos sin autorización nacional. En ese momento, el ministro Sturzenegger había resaltado que la medida "generará una caída abrupta en el costos de los medicamentos".

Al día de hoy, el propio Sturzenegger reconoció que "el precio de medicamentos en Argentina sigue siendo varios órdenes de magnitud más alto que en países europeos". En este escenario, dio a entender que se aproximan más modificaciones. "Tenemos mucho trabajo por delante", expresó.

Fuente: Infocielo