Por la suba de precios en productos de consumo masivo y la fuerte caída del poder adquisitivo, las ventas de los hipermercados y supermercados provinciales cayeron un 3% promedio en enero, en la comparación interanual, y representó el mismo descenso que en diciembre.


Un informe de la consultora Ecolatina estimó que en 2019 el consumo privado volverá a colocarse en terreno negativo. Sus economistas advierten que la baja será de -1,4% interanual (en 2018 fue de -1,5%). En cuanto al consumo masivo (de la canasta básica), estiman una caída cercana a 1% interanual, un retroceso menor al de la totalidad del consumo privado. Esto se debe a que comenzarían a mostrarse variaciones interanuales positivas a partir del tercer trimestre, "cuando el poder adquisitivo de los salarios experimente mejoras parciales respecto al 2018".
Fuentes del sector comercial apuntaron que la caída que se está viendo este mes es ocasionada por una recesión que -según las grandes cadenas- "ya no se puede sostener ni con promociones, bonificaciones ni pagos financiados en muchos casos". Más aún, se observa un escenario con nuevos despidos para los primeros meses del 2019. El plan de Precios Cuidados se renovó hasta el 6 de mayo, aunque su escasez en las góndolas es notoria, y según las fuentes, "no mueve la aguja para nada".
En casi todos los segmentos de los productos se observaron bajas en las ventas, y aunque la situación de los alimentos es la más preocupante, los artículos de limpieza son los que tienen una gran retracción, con descensos de más del 6 por ciento. A comienzos del mes, diversos empresarios de la alimentación comenzaron a informar nuevos aumentos a cadenas de hipermercados, supermercados provinciales, autoservicios, almacenes y centros mayoristas. La decisión de las empresas nucleadas en la cámara Copal desairaron nuevamente al ministro de Producción y Trabajo, Dante Sica, quien se aventuró a señalar que "en los próximos meses los precios se desacelerarán".