Los taxistas porteños se manifestaron este mediodía frente a la sede del gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, en el barrio de Parque Patricios, donde entregaron un petitorio contra la puesta en marcha del servicio de transporte para pasajeros Uber, que comenzó a operar la semana pasada a pesar de existir una prohibición judicial.
"Venimos a entregar un petitorio para defender el compromiso con el gobierno", precisó a Télam el titular del Sindicato de Conductores de Taxis, José Ibarra, tras remarcar que "venimos en apoyo al taxi, en contra de Uber, porque es ilegal y no están habilitados".

Frente a la Casa de Gobierno, en Uspallata y Atuel, los taxistas se movilizaron hoy en el marco de un plan de acción contra la empresa virtual, tras haber presentado la semana pasada un amparo reclamando el cese de su actividad.

A pesar de las protestas y del fallo del tribunal en lo Contencioso, Administrativo y Tributario número 15, que ordenó al Ejecutivo de la Ciudad tomar medidas para que Uber cese su funcionamiento de manera inmediata, la empresa anunció que los usuarios podrían viajar gratis hasta hoy, en un claro desconocimiento de la medida.

La semana pasada la Legislatura porteña se sumó a los repudios a Uber por la forma ilegal en la que funciona.

Los taxistas sostienen que con este nuevo servicio de transporte peligra su fuente de trabajo y que a diferencia de los coches de Uber, ellos deben cumplir con rigurosos controles y afrontar más gastos que un auto particular.