Se reunirá con Mauricio Macri apartir de las 10.30. Hace casi 20 años que no hay un encuentro bilateral entre los mandatarios de Argentina y EEUU

El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, llegó esta madrugada a Buenos Aires, acompañado por su esposa, Michelle, sus dos hijas y una gran comitiva de más de 850 personas, integrada por ministros y periodistas.

Protegido por cuatro aviones caza, el avión presidencial "Air Force One", procedente de Cuba aterrizó en el aeropuerto internacional de Ezeiza a la 1.10 de la madrugada (hora local).

Obama fue recibido por la canciller Susana Malcorra, que se debió trasladar hasta la pista en un auto especial que proveyó el dispositivo de seguridad norteamericano.

La llegada del presidente Obama estuvo precedida de una avanzada del servicio secreto norteamericano que desde principios de marzo estuvo planificando los detalles del arribo con responsables argentinos de la seguridad en Ezeiza, según informan los medios locales.

Los atentados en Bruselas de ayer a la mañana pusieron en alerta a los responsables del operativo que llegaron a proponer a la administración del aeropuerto internacional que suspendiera la actividad mientras Obama se encontrara en la Argentina, revelaron a Télam fuentes de la Administración Nacional de Aviación Civil (Anac).

La primera actividad de Obama se iniciará hoy a las 10.30, cuando se encuentre con el presidente Mauricio Macri en la Casa Rosada para el tradicional saludo de las delegaciones en el Salón Blanco, que dará lugar luego a una reunión a solas en el despacho principal.
El encuentro en la sede del gobierno argentino se cerrará con una conferencia conjunta de Macri y Obama.

La visita oficial del mandatario estadounidense incluye también una visita a la catedral metropolitana, un encuentro con jóvenes emprendedores y con empresarios. Además Obama anunciará la desclasificación de más archivos de inteligencia sobre el llamado Proceso de Reorganización Nacional y visitará el Parque de la Memoria donde en homenaje a los desaparecidos durante la dictadura cívico-militar.

La última vez que un presidente de Estados Unidos vino a la Argentina para mantener un encuentro mano a mano con su homónimo sudamericano fue en 1997, cuando Bill Clinton fue recibido por el ex presidente Carlos Menem.

Ocho años después, en noviembre de 2005, George W. Bush mantuvo en Mar del Plata un encuentro con el fallecido ex presidente Néstor Kirchner, aunque no se trató de una reunión bilateral porque se produjo en el marco de la IV Cumbre de las Américas, para la cual el presidente estadounidense permaneció 36 horas en la Argentina.

Con la visita de Obama, el gobierno argentino espera relanzar las relaciones bilaterales que estuvieron dañadas durante el kirchnerismo, avanzar hacia acuerdos de seguridad y lucha contra el narcotráfico, buscarán profundizar el comercio y la defensa de los derechos humanos.