Como "Puro Programa Peronista", así llamó el economista Carlos Melconian a la estrategia del Gobierno para estabilizar al corto plazo la sostenibilidad de la deuda externa y a la vez, definió como "muy pro" bonista la oferta que se llevaría el "éxito" en la renegociación con los acreedores.

El ex presidente del Banco Nación consideró que "los últimos acontecimientos en torno a la deuda mostraron que vamos a un escenario dual, de blanco y negro."

"Negro es terminar mal, y blanco hay que definir qué es", explicó.

"Creo que la Argentina, para el universo de deuda en dólares bajo ley extranjera, se metió en un lío de una oferta que va a tener que ser muy pro-bonista . Tienen cláusulas legales más dificultosas para una negociación", añadió.

Para Melconian, "el universo con el que te vas a tener que juntar concentra unos 40 mil millones de dólares, de los 200 mil millones relevantes de deuda. Eso es un buen volumen de los bonistas."

"Las leyes neoyorquinas funcionan bastante bien contra los buitres, pero también da lugar a que surjan bloqueadores".

El economista graficó: "ésto es un PPP: Puro Programa Peronista. No quiero meterme en política, ni hablar del peronismo, pero para estabilizar a corto plazo, dentro de la normalidad, puede funcionar".

"Pero para eso hubo que poner un fuertísimo control de cambios, hubo que subir fuerte la presión fiscal, o tomar decisiones de congelamiento por 180 días. Basadas en esas tres cosas que no son sostenibles en el tiempo, la idea de tener este año menos de 54% de inflación o la de tener una caída del PBI menor a 2% no sé qué tan exitoso puede ser", añadió.

A su criterio, el Gobierno "tendrá que evaluar si puede hacer algo más o menos que te va a generar un lío más adelante, o si va a querer hacer algo más profundo, que es tener un programa en serio y encarar las reformas estructurales."

"Pero veo al Gobierno con la intención de que le liberen este período presidencial y que Dios ayude.", sentenció.

Por último, observó: "hay como un triángulo de intereses en la relación bonistas, Gobierno y el Fondo, que no veo que vayan en la misma línea. Es una situación en la que yo creo que el Gobierno va a intentar tirarse un lance con los bonistas sin el FMI. Los bonistas van a ver si en río revuelto van a pescar algo más".