Lo aseguró Kristalina Georgieva, titular del Fondo Monetario Internacional.

El Fondo difundió un comunicado donde reconoció que la deuda de la Argentina "no es sostenible" y por eso le pidió una "contribución" a los acreedores privados.

Sobre este punto, Alberto Fernández sostuvo que "el Fondo nos dio la razón, decíamos la verdad" en cuanto a la imposibilidad de hacer frente a la deuda en las actuales condiciones.

Georgieva enfatizó que: "Compete al gobierno argentino llevar a cabo negociaciones con los acreedores".

Para el Gobierno, las declaraciones de la delegación del Fondo fueron un aval para encarar las dificultosas negociaciones con los bonistas y evitar la caída en default.