Frente al temor de una cuarentena generalizada por el coronavirus, empresarios del sector de consumo masivo aclararon que “no existen motivos” para que se concrete la posibilidad de desabastecimiento y escasez de alimentos, bebidas y productos de primera necesidad.

No obstante, admitieron que un parate en la producción para evitar la propagación del coronavirus podría profundizar la crisis económicas en las pymes.

Fuentes de una empresa de primera línea asociada a la Coordinadora de las Industrias de Productos Alimenticios (Copal) confirmaron que “puntos de venta minoristas y supermercados aumentaron sus ventas en los últimos tres días”, pero aclararon que “el conflicto se concentró en la reposición de los productos y no en la falta de alimentos y bebidas”.

“Vemos que hubo una concentración de las compras por la posibilidad de aislamiento forzado para evitar el coronavirus, pero eso no quiere decir que eso se traduzca en mayores ventas ya que la capacidad de consumo de la población no variará sustancialmente”, admitió a este diario un ejecutivo de una empresa alimenticia.

Los empresarios admitieron que la necesidad de la aplicación de un protocolo de aislamiento “servirá para evitar una crisis sanitaria grave”, aún cuando “se sabe que existirá un impacto económico inevitable por la necesidad de parar las máquinas si es que se sigue el camino de los países europeos que están en un momento de mayor exposición.

“Hay que priorizar la situación sanitaria, sin temer por el desabastecimiento porque si bien se informaron mayores ventas en carnicerías y supermercados, eso no significa que habrá escasez porque hay carne y alimentos y bebidas suficientes para superar la crisis. Existe un stock importante y las fábricas tienen capacidad de aumentar su producción si fuera necesario”, afirmó uno de los empresarios consultados.

Las industrias pymes tienen temores más cercanos sobre funcionamiento. Mientras reclaman que el Ministerio de Desarrollo Productivo ponga en marcha un “plan de prevención dentro de todas las fábricas para evitar el contagio, pero a la vez que no haya un parate en la producción”.

"Cualquier medida que se tome, como paralizar la producción como prevención, generará un enorme problema”, alertó el presidente de Industriales Pymes Argentinos (IPA), Daniel Rosato.

El líder industrial pyme señaló: “Desde el IPA estamos planteando saber quién pagará el costo económico de empresas que deberían estar en cuarentena con pérdidas enormes por costos fijos que son importantes, que se deben afrontar con o sin producción, como los salarios, los impuestos, entre otros tantos que se pagan sin que se prenda una sola máquina”.

“Tenemos que plantear medidas de prevención en todos los sectores de la industria junto con el Gobierno para que exista un plan de prevención para todos los trabajadores. Medidas que busquen la prevención del contagio”, destacó.

Rosato admitió que “no existe previsión” ante un eventual cierre de los portones de las fábricas, aunque aseguró que “sí existe una gran preocupación de cómo va a afectar a la economía del país si se toman algún tipo de medidas”, al señalar que “las pymes van a caer en una situación de crisis profunda si es que se llega a la decisión de paralizar todo”.