Hace sólo tres meses, una ordenanza aprobada por unanimidad, hablaba de proteger a la Laguna de Monte. Sin embargo, de buenas a primeras y de forma repentina, los concejales aprobaron un negocio privado que promueve la construcción indiscriminada de edificios que abarcaría la mitad del frente costero.

Walter Martello, Defensor Adjunto del pueblo de Buenos Aires, denunció que "la norma atenta además contra la mano de obra del lugar, la posibilidad de desarrollo turístico y obviamente la cuestión ambiental".
De manera impensada, esta vez, se pusieron de acuerdo viejos radicales y peronistas, ya que el proyecto tiene a dos principales interesados: por un lado, Mirta Piñon, viuda del ex intendente Raúl Basualdo, y por el otro, José Castro, actual candidato de Cambiemos a la Intendencia de Monte.

Son casi 8 kilómetros de extensión a lo largo de la orilla de la laguna. Allí es donde se podrán desarrollar emprendimientos en altura, sin ningún tipo de estudio previo para esa futura zonificación.
El funcionario resalta que “una cosa así no se ve en ningún lugar del mundo”. Y explicó que “si le vas a agregar a la vera de la laguna más de 12000 habitantes, por ley, se debería estudiar el impacto que eso va a tener", y por ejemplo, “dónde se van a arrojar los residuos cloacales”.

"Nosotros queremos exigirle a Sandra Mayol, la actual intendenta, que vete la ordenanza", a la vez que pedirles a los concejales, que no insistan sobre este proyecto, porque responde a otros intereses que nada tiene que ver con proteger la laguna", señaló Martello.
También advirtió que dicho proyecto, "sólo traerá degradación de la laguna de Monte y la muerte, literal, de una ciudad cuyo principal motor es el microturismo".