La ex senadora nacional por Buenos Aires, Hilda "Chiche" Duhalde, confirmó en las últimas horas que quiere "ser candidata a gobernadora" de la provincia en las elecciones de 2019 y manifestó que ella y su esposo, el ex presidente Eduardo Duhalde, están "acompañando la idea de que Roberto Lavagna sea candidato a presidente" ya que es "el hombre que estamos necesitando".

Por otra parte, calificó a los actos públicos que dirigentes del peronismo no kirchnerista compartieron en las últimas semanas, como el del 17 de octubre en Tucumán, como "una foto" y que "hay que ver cómo sigue la película" ya que está segura de que "va a correr mucha agua abajo de este puente".

"Deseo ser candidata a gobernadora de Buenos Aires. Quiero participar y competir y que sea la gente la que decida", afirmó en una entrevista con radio Cooperativa, en la que también aseveró: "Creo que estoy capacitada para hacerlo".

Aunque manifestó que "no iría en ningún espacio que sea conducido por Cristina Kirchner", la exsenadora apuntó que para dotar de mayor estabilidad parlamentaria y política a una alternativa a Cambiemos "no alcanza con el partido peronista".

"Hace falta que se aúnen sectores del radicalismo y de otros partidos con raigambre popular", aseguró. Al respecto dijo que ella y su esposo están "acompañando la idea de que Roberto Lavagna sea el candidato a presidente" porque "es un hombre que no pretende ser reelecto y que busca reodenar el país".

La candidatura del ex ministro de Economía a la presidencia nunca fue confirmada por el propio Lavagna y, de hecho, su hijo y diputado nacional, Marco Lavagna, ha dicho en repetidas ocasiones que no ve a su padre compitiendo por una candidatura a conducir el Poder Ejecutivo. Sin embargo, los Duhalde dan por hecho que finalmente competirá. "Es un hombre moderado, que puede cerrar la grieta. Un hombre que ni siquiera sé cuál es su ideología. Es el hombre que estamos necesitando", afirmó Chiche.

Por último, consultada por el debate de esta semana sobre el Presupuesto en Diputados, aseguró que "es un hecho que va a ser aprobado" y que "el Gobierno deberá hacerse cargo de las consecuencias sociales".

"La ley de presupuesto en general no se cumple, pero este año tiene una importancia distinta porque es una exigencia del Fondo Monetario Internacional. El nivel de ajuste que se propone está marcado por la decisión del Fondo que pide déficit cero", finalizó.